Los lados externos y la zona debajo de los senos, son zonas erógenas muy conocidas; mas debes probar hasta qué punto le complace a tu pareja la intensidad con la que le acaricias esa zona erógena y el tiempo que ocupas en esa zona.
Sentir la energía de su reciente actividad sexual haciéndolos palpitar entre ellos podría acrecentar su excitación y podrían deslizarse sencillamente en un suave movimiento de balancín extendiéndose hacia adelante y agarrándose de los brazos antes de volver a caer sobre los cojines.
Tanto el hombre como la mujer pueden trabajar de manera exitosa en construir una relación cariñosa con sus respectivos hijos, si buscan consejería profesional y desarrollan estrategias para ganarse la simpatía de los hijos de su pareja conforme avanza la relación.
Es ese control de la acción para el control de las emociones y sobre todo de esa actitud mental positiva que debemos llevar siempre y en toda circunstancia a nuestro lado, es creerte que puedes lograr lo que te planteas. A lo que me refiero es a la AMP.
Por último, recuerde que el humano es un ser único. Aunque no lo perciba directamente, no existe nadie igual a usted: su voz, los rasgos de su personalidad, sus hábitos, su inteligencia, sus gustos, sus preferencias, su cuerpo… ¡todo es suyo y únicamente suyo!
Asimismo se da el caso de la pareja que sigue sus relaciones sexuales igual que siempre hasta llegar al séptimo mes del embarazo (más o menos, cuando las formas del cuerpo femenino están ya perjudicadas absolutamente), y entonces se interrumpen de pronto.
En un caso así estamos frente a un buen asado. ¿Tienes hambre? Los malentendidos, batallas de egos y malos rollos en general en ocasiones suceden. Empezar una conversación por WhatsApp después de una discusión precisa de intentar cerrar antes la puerta que propició el daño. Es decir, curar las heridas.
Esto es, hoy entendemos la sexualidad como un gusto, como una actividad lúdica en la cual, si bien suene un poco atrevido, todo se vale, en el tanto no dañe, no se obligue a la otra persona y sea agradable.
Un detalle importante: no le devuelvas el dinero, todavía una vez que el juego finalice. Continuar con el juego es del fetiche. Haz como si verdaderamente fueras una dama de compañía, solo que de un solo cliente: tu compañero.
Y en el momento en que eso ya ha ocurrido, una vez que les has hecho un juego y has establecido una buena sintonía con ellos, en el momento en que ya hemos tomado una resolución o bien nos hemos dejado llevar por algo, se activa en nosotros una suerte de inercia que nos hace reafirmarnos en lo que hemos decidido o bien hecho.
