El umbral de dolor de cada persona está ubicado en un nivel diferente
El día que confesó que ella había puesto el revólver sobre la mesita por la noche, no había podido eyacular por la mañana. La alarma no había sonado y me desperté a la hora en que las comunicadoras de los informativos han desaparecido para dar paso a anuncios de batamanta y sillas Hawa2.